martes, marzo 14, 2006

Y cambió la bandera, así de fácil.

Claro, y la cambió con toda tranquilidad, por no decir impunidad.

Para todos allá en Guatemala, supongo que habrán visto en las noticias los cambios hechos a la bandera de la República Bolivariana de Venezuela. De tal cuenta, ya este domingo que pasó se hicieron oficiales dichos cambios, precisamente durante la celebración del día de la bandera.

¿Qué cambios le hicieron? Eso es lo de menos y completamente irrelevante. Agregarle una estrella, darle vuelta al caballo, la verdad es de una intrascendencia total. ¿Por qué? Pues porque hay infinidad de cosas mucho mas importantes de las cuales ocuparse por parte del gobierno, y en este caso en particular directamente del señor Chávez, que estar cambiando escudos y banderas.

Con todas las carencias que sufre la sociedad venezolana, a pesar de contar con los recursos económicos prácticamente ilimitados por el petróleo, y con la pobreza creciendo día a día en una nación que debería estar entre las potencias del mundo solo por sus recursos naturales, encuentro completamente absurdo dedicar una cantidad de dinero ridículamente grande a cambiar la bandera nacional.

Aceptémoslo, esto en realidad es una medida política, es demostrar que el gobierno puede hacer lo que le de la gana aunque sea pasando por encima del pueblo, es como si le dijeran al pueblo: “me importa nada lo que opinen, lo hago porque me da la gana y porque puedo”. Simplificándolo aun mas, una falta de respeto al soberano, y ¿quién es el soberano? Nada más y nada menos que EL PUEBLO.

Dicen que Bolívar hace casi 200 años ya había dispuesto lo de la octava estrella, pero nadie se cree que lo están haciendo para darle gusto a su alma. Con todo respeto gente venezolana, y comprendiendo lo que significa para esta sociedad su identificación con la figura de Simón Bolívar, pero creo que ya es hora que lo dejen descansar en paz, en todos los sentidos. Bolívar para arriba, Bolívar para abajo, Bolívar aquí, Bolívar allá, señores, les garantizo que hasta el mismo señor Bolívar estaría ya harto de ver que usen tanto su nombre inútilmente y no se pongan a construir un mejor país. Entiendo que celebren a sus figuras históricas, que enaltezcan la memoria de sus próceres, pero así tampoco se construye patria.

A mi humilde forma de ver, considero que para un cambio en los símbolos patrios como mínimo se debió consultar al pueblo, ya que son los símbolos que representan la identidad de una nación, y de TODOS sus integrantes, no solo de quien la preside o de los pocos miembros de la asamblea nacional. Con lo que le gustan las elecciones al gobierno pues una consulta popular hubiera sido una buena oportunidad de seguir probando las maquinitas esas de votación.

Total, que el pueblo va y se aguanta, como suele suceder. Y conste que considero que esto es irrelevante, si fuera algo de importancia mejor ya ni sigamos…

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y por pura gana cambiaron la bandera? Que chafa!

Aunque igual tristemente creo que aquí el pueblo no haría nada si se deciden a cambiar nuestra bandera!

Saludos!